Left to die es el tributo más esperado por todos los fanáticos de Death, sobre todo los más
antiguos que no transan el sonido o la etapa progresiva posterior en que se convirtió la
banda
Todos quisiéramos que Chuck aun estuviera vivo, quizás habría vuelto a sus raíces como
tantas otras bandas que han dado giros de 180 grados volviendo a sus inicios, cuando ya
la experimentación o la técnica demostrada solo en el virtuosismo les aburrió.
En esta ocasión tendremos oportunidad de ver a dos miembros originales que participaron
en álbumes clásicos como Leprosy, es el caso de Rick Rozz, quien me atrevo a decir es el
guitarrista que patentó los solos con palanca, algo que nos fascinaba a todos y que sin
duda es un sello y líder de esta formación que tributa a un grande, tributarse a sí mismo
dirá él; por otra parte el bajista y compositor del Spiritual Healing Terry Butler, que además
tocó en Obituary, sin duda dos leyendas que estarán pisando las tablas del escenario del
teatro Cariola ¿en cuánto? Dos semanas más casi nada…así que no veo por que no
intentar abstraerse de la falta de nuestro ídolo y disfrutar de temas que nunca tuvimos
oportunidad de ver en vivo en nuestro país, al menos con estos dos miembros alguna vez
oficiales.
En batería tendremos a Gus Rios de Gruesome y otras bandas, la formación se completa
con el vocalista Matt Harvey (Exhumed, Gruesome, Expulsion) quien además es la voz de
los tres tributos oficiales de las tres etapas por así decirlo que tuvo la banda. Sería de
culto ver también a Living Monstrosity, el tributo de la etapa del Spiritual healing álbum,
por muchos considerados una obra maestra y del cual Death no tocaba nunca sus temas
en vivo, en fin, explicaciones y análisis sobran acá, la cosa es disfrutar de un concierto
que esperamos sea inolvidable y que nos haga recordar y llorar de emoción.