Héroes anónimos de la escena post-grunge desde los 90, la banda escocesa-estadounidense Garbage se presento el dia de ayer en Movistar Arena junto a la banda nacional Saiko!!!
Como teloneros de la banda nacional Saiko Originarios de Santiago, el grupo está en el escenario y con una presentación pareja en todo sentido a cargo de su vocalista Denisse Malebrán celebran con todo sus 25 años de carrera, pasando por todo sus éxitos, dandole un aire mágico a su espectáculo encantando a todo el recinto esta noche, como momento especial la banda toco un cover de los prisioneros ( estreches de corazon) del grupo Los prisioneros ( haciendo que el movistar sea un karaoke colectivo).

GARBAGE:
Para quienes nunca han asistido a un concierto de Garbage, es imposible prepararlos para lo que están a punto de presenciar. Los sonidos, las imágenes, la potencia y la electricidad que queman la atmósfera. Con la ayuda de imágenes abstractas y secuencias con patrones, y una serie de luces estroboscópicas y focos, este es el Garbage que todos conocen y conocerán. Abriendo con temas como «#1 Crush», «Godhead» y el éxito mundial «I Think I’m Paranoid», no se perdió tiempo en animar al público a moverse, bailar, saltar y cantar. Sin ningún conocimiento previo, uno podría confundir este concierto con uno dirigido por un grupo de veinteañeros en su mejor momento, en lugar de un grupo de artistas y productores de rock experimentados. La edad es solo un número, el tiempo es una ilusión, y cuando se trata de Garbage, la música es todo lo que existe en ese momento.
Manson se hizo un nombre como una persona vocal en la industria, y entre canción y canción, compartía anécdotas y momentos de la carrera de la banda de una manera que parecía la charla TED más punk-rock a la que cualquiera podría asistir. La que más resonó fue la historia de cómo el anterior sello de la banda, Interscope, les había informado que los despedirían, y Manson luchaba por comprenderlo cuando, conduciendo por la carretera, vio un póster de su banda, que se vendía en la esquina por tan solo 2 dólares. Describiéndolo como uno de los puntos más bajos de su carrera, usó la historia para inspirar a todo el público: nadie está nunca «terminado», ninguna banda nunca está «terminada» y, especialmente en lo que respecta a ellos mismos, nadie es «demasiado viejo» para seguir adelante en las artes. Añadiendo que ella misma está a solo unas semanas de cumplir 58 años, se elogia a sí misma y a sus compañeros de banda por perseverar a pesar de todo para llegar al punto en el que están hoy. En concreto, volver a recintos como el O2 Apollo y tocar para un público de ese tamaño que había delante de ellos en ese momento.

Si alguien alguna vez necesita motivación para mantenerse decidido y seguir adelante con sus emprendimientos, Shirley Manson está lista y disponible.
El repertorio parece estar minuciosamente planificado y organizado, y cada tema tiene su propio propósito. Al incluir temas como «The Trick Is to Keep Breathing» y «Bleed Like Me», con profundos significados emocionales, y combinarlos con grandes éxitos como «Stupid Girl» y temas más recientes como «No Gods No Masters», no hubo accidentes ni dudas sobre qué interpretar. Cada uno acudió al concierto por sus propios intereses, por las canciones que quería escuchar, y a juzgar por los gritos y vítores, parece que todos quedaron satisfechos con lo que Manson y compañía eligieron. Una síntesis perfecta de su larga carrera, que complació a todos los fans en todos los sentidos.
Ademas la banda hizo un mini homenage a la banda Depeche Mode…
Terminar el concierto con el sencillo número uno del grupo, «Only Happy When It Rains», fue como recibir una recompensa por la paciencia. La canción que hizo cantar y bailar a todos en las gradas, este es el momento que une todo. Puso la noche en su punto más feliz y preparó a todos para su regreso al mundo real, fuera del recinto.
Garbage es uno de esos grupos emblemáticos que nunca desaparecerán, nunca se desvanecerán, nunca morirán. Son una banda fundamental para la música: desde sus inicios en los 90, hasta sus momentos más rockeros en los 2000, y ahora, encontrando su camino de regreso con una base de fans más grande que nunca en la década de 2020. Mientras haya una estrella de rock escocesa que se suba al escenario para hacerle una señal obscena al establishment y trabajar para impulsar a todos los creativos en sus espacios, el rock nunca morirá y Garbage vivirá para siempre.
Por: Solange Aracena.
Fotografia Saiko: Nelson Galaz.
Fotos Portada: Pedro Rodríguez